Carta del Diablo "Hermanos de Sangre"

Dicen que cuando ruedas en moto, llevas en ti, parte de las personas y las motos que te acompañaron a lo largo de tu vida.

Cada día que sales de casa y miras al frente estas continuando con la vida, los proyectos son más numerosos que los recuerdos, pero los recuerdos, son parte de tu historia.

Parece mentira pero es real, las aventuras vividas en el pasado retornan a tu mente en forma de tradición, la familia motera es muy grande, variada pero son todas iguales.

Cada curva, cada paisaje, cada estación del año son diferentes, cada día es uno nuevo, cada momento se hace eterno, así es la ruta, montañas, ríos y valles……

Algunas veces las vendemos o las cambiamos, las dejamos para que otros puedan saborear con ellas nuestras mismas sensaciones desde su propio punto de vista, que se cuiden ambos!!!

Somos infieles por naturaleza, aunque las añoramos con mucho cariño, pronto hay una nueva sustituta en el garaje que nos hace “recordar” menos a la anterior compañera, y las comparaciones, son jodidamente odiosas.

Ocurre lo mismo con los amigos y compañeros que ya no ruedan con nosotros, cada vez que hacemos una ruta, en otro tiempo con ellos, no dejamos de mencionarlos en nuestras tertulias, sacando siempre el lado positivo y añorando, añorando mucho.

Abriendo siempre la mano al nuevo amigo si es de Ley, cediendo el paso compartiendo el futuro para nosotros, no es importante la meta, lo realmente importante es el tiempo que durara nuestro viaje.

Si algún día me paro espero que estés a mi lado, cuando suene esa canción en mi armónica, cuando no pueda montar en moto me dejare morir lentamente.

Nuestra forma de vivir no es la mejor ni la peor, simplemente es diferente, porque un día y hasta que muramos, decidimos ser Hermanos de Sangre!!!!!!